Tendencia mundial de productos orgánicos influye en las viñas chilenas

La demanda del consumidor por alimentos orgánicos se está fortaleciendo. Según la Asociación de Comercio Ecológico (OTA), el 80% de las familias estadounidenses ahora compran productos orgánicos; los alimentos orgánicos representan más del 5% de las ventas minoristas de alimentos en los EEUU.

La conciencia de los consumidores sobre los métodos de producción orgánica también está aumentando en otras regiones. En la reciente edición latinoamericana de la Cumbre de Alimentos Sustentables, Organis mostró que el 55% de la población brasileña reconoce el sello nacional 'Orgánico' para productos orgánicos.

Las razones de salud son el principal impulsor de las compras de alimentos orgánicos, y las preocupaciones de los consumidores sobre los pesticidas, los organismos modificados genéticamente y las hormonas de crecimiento son los principales motivos de compra.

Además en el mundo, los millennials ejercen una mayor influencia, representando la mitad de las compras de productos orgánicos en algunos países, y el vino no es la excepción.

Los secretos del vino orgánico

En Chile, la tendencia influye a las viñas chilenas, que ya compiten en la categoría, y uno de los vinos ecológicos disponibles en supermercados es Tarapacá Gran Reserva Orgánico, que es producido a partir de uvas cuyo tratamiento excluye productos químicos como fertilizantes, herbicidas y pesticidas, con lo mejor de cada cepa proveniente de los diferentes terroirs del Valle del Maipo.

Este incluye la representación del Syrah en su color rojo oscuro y de toques especiados, el Cabernet Sauvignon y el Carmenere que expresan frutos rojos y concentrados, se suman al clásico Cabernet Franc que logra entregar diversos toques herbales, con ensambaje de etiqueta de papel ecológico que posee un 80% de fibras recicladas y elaborado con uvas orgánicas certificadas – proveniente de uno los valles más prestigiosos para elaborar vinos tintos en Chile – vestirá este collarín de edición limitada hasta acabar stock.

Los conocedores sugieren que ensamblajes de estos tipos se complementen con quesos duros y maduros, legumbres, pastas bien condimentadas, carnes blancas y cordero al palo, en onda con los productos orgánicos que están disponibles para los clientes chilenos.